Esta semana en mujeres que nos inspiran tenemos a Charlotte Bronte, quien fue novelista y poeta, cuyas obras se convirtieron en clásicos de la literatura inglesa.
De nacionalidad inglesa, esta mujer falleció en 1855 a causa de tuberculosis, aunque también se habla de tifus. Nacida en 1816, su vida no fue fácil, ya que tuvo que vivir asumiendo la muerte de sus hermanos a una temprana edad.
Charlotte amaba escribir, pero no lo tuvo fácil ya que su primera novela titulada “The Professor” fue rechazada.
Más tarde, en 1847, publicó su segunda novela
“Jane Eyre” y aunque pueda parecer extraño, al principio no fue bien recibida. Después, comenzó a alcanzar el éxito y empezó a recibir críticas favorables que perduran en la actualidad.
Gracias a obras como estas, Charlotte Brontë ha sido llamada la "primera historiadora de la conciencia privada".
El libro contiene elementos de crítica social y muchos consideran que está adelantado a su tiempo debido al carácter individualista de Jane y cómo la novela aborda los temas de clase, sexualidad, Religión y feminismo.
Este miércoles se estrenó en COSMO la película, si no pudo verla podrá hacerlo hoy, 12 de octubre, a las 23:55 horas.
En el siglo XVIII las mujeres eran consideradas inferiores y estaban subordinadas a un hombre, pero Bronte tuvo valentía a la hora de tratar numerosos temas que la mayoría de las veces eran censurados.
Por su valentía consideramos que es una mujer inspiradora ya que define a la perfección la palabra “feminismo”.
Pero toda lucha tiene consecuencias, y, aunque la obra fue aclamada por muchos, también fue tachada de manifiesto feminista, peligroso y erótico en octubre de 1847.
Charlotte era consciente de que “Jane Eyre” arremetía contra el sistema patriarcal y por eso decidió entregar su manuscrito bajo el seudónimo asexual de Currer Bell.
“Jane Eyre” representa el movimiento revolucionario que definía a su autora, ya que la obra habla de desigualdad, denuncia temas como la hipocresía de los clérigos y cuestionaba otros como la superioridad de las autoridades.
Todo esto se creó en un ambiente de tensiones durante las revoluciones europeas contra el capitalismo, por lo que todos aquellos que estaban en contra de lo que Charlotte publicaba, tacharon a la obra de “jacobismo moral” y anticristiana.
Pero como ella dijo: “No soy un pájaro; y ninguna red me atrapará; soy un ser humano libre con una voluntad independiente”. Sin duda un ejemplo a seguir para todas las mujeres, ya que para ella vivir en una sociedad que te retiene no fue un muro que no pudiese derribar y consiguió hacerse oír.
Redacción COSMO
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