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Método Kayla: Cómo puede cambiar tu cuerpo el método Kayla
Todo sobre el método Kayla
04/06/2020
¿Ya has oído hablar sobre el método Kayla? Con más de nueve millones de seguidores en Instagram, Kalya Insines se ha convertido en la nueva revelación del fitnes mundial y del que vemos sus resultados en miles y miles de fotos que dejan ver el antes y el después de cada personas tras poner en práctica este método, siempre con el hashtag #kaylasarmy, que causa furor.
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Lo más novedoso y atrayente es que tan sólo se necesitan 12 semanas para un cambio radical, por lo que su éxito está asegurado. Su workout cuenta con dos circuitos que hay que realizar en dos ocasiones completos. Cada uno de esos circuitos consta de 4 ejercicios de treinta segundos. En cada uno hay que intentar hacer el mayor número de series posibles y descansar un poquito entre circuitos, pero mejor no entre ejercicios.
La duración es de unos 28 minutos de pura intensidad que resultan muy efectivos y rentables en relación tiempo y beneficios. Además también resulta muy económico ya que no hace falta mucho material, y se combinan de forma muy inteligentes elementos aeróbicos con elementos de fuerza, para obtener mejores resultados finales.
La guía del Método Kalya incluye entrenamientos de resistencia, entrenamientos cardiovasculares y estiramientos, perfectamente armonizados para conseguir el objetivo y no hacernos daño durante el proceso, aunque recuerda que antes de comenzar ningún plan de ejercicios debes siempre preguntar a tu médico si en tu caso es correcto o no.
Resistencia en el método Kayla
Los entrenamientos de resistencia del Método Kalya están basados en elementos aeróbicos y fuerza, que se conjugan para mayor efectividad. El pulso sube a unos niveles importantes y debe mantenerse ahí con gran intensidad durante los 28 minutos que estamos realizando la rutina marcada. Además no hace falta mucho equipo para esta parte del método, como ya hemos señalado.
Cada semana las rutinas de ejercicios cambian para no causar aburrimiento en los usuarios, y conseguir tonificar todos los grupos musculares del tren superior e inferior, de una forma inmejorable. Los resultados son realmente sorprendentes si sigues paso a paso con atención y sin saltarte las normas prefijadas en la metodología.
La parte cardiovascular en el método Kayla
Consta de dos apartados muy concretos, por un lado un cardio de baja intensidad, de entre unos 35 y 45 minutos andando a paso ligero, que la autora denomina LISS, y una segunda parte con intervalos de entrenamiento a alta intensidad, que Kalya denomina HIIT. La suma de ambos resulta en un sumatorio de efectos increíbles en tan sólo tres meses.
Su libro ‘The Bikini Body’ no sólo es un método deportivo de entrenamiento y una guía dietética muy bien calibrada y pensada que implementar en 28 días; es también un mecanismo para mejorar la autoestima y sentirnos mejor física y mentalmente, ya que ambas se retroalimentan de forma bidireccional. Si nos vemos bien nos sentimos mejor, y si nos sentimos mejor la salud general se beneficia también.
Lo más destacado del método es que resulta tremendamente realista con las expectativas que la mayor parte de las personas pueden hacerse de cara a enfrentar una dieta y plan de entrenamiento, sin engaños ni letra pequeña. Resulta totalmente posible para casi todo el mundo seguir el programa y conseguir buenos resultados con él.
Así funciona la dieta del método Kayla
Por otro lado la dieta complementaria que plantea Kayla resulta muy llevadera ya que no prohíibe o elimina grupos o familias de alimentos completos como otros sistemas, y además no te hará estar contando calorías. Al contrario, su dieta incluye todos los grupos de alimentos, pero bien ordenados por comidas y en su justa medida, sin pasarnos con ninguno.
La dieta del Método Kayla ha sido elaborado por un grupo de especialistas en nutrición que han basado su éxito en la conjugación de los siguientes seis grupos de alimentos, que resultan capitales para nutrirnos bien y tener las fuerzas necesarias para que el plan de ejercicios obtenga los resultados planteados en el origen:
Cereales y semillas
Arroz, quinoa, y copos de avena, son la base de hidratos de carbono necesarias, por lo que se toman unas seis raciones diarias de forma recomendada. Su aporte de vitaminas y minerales como el magnesio y el hierro son esenciales para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo al margen de la energía inmediata que proporcionan.
Grasas saludables
Aguacates, frutos secos y semillas son fuentes de grasas sanas y vegetales que nuestro cuerpo necesita cada día para funcionar como un reloj de precisión. El organismo las necesita para el correcto funcionamiento celular y principalmente porque no puede generarlas por sí sólo. Por ello resultan esenciales.
Legumbres y verduras
Con muy pocas calorías y su alto aporte vitamínico y mineral resultan capitales en cualquier dieta, y en la Kayla también. Se recomiendan unas cinco raciones diarias dado que son oro puro para nuestro organismo y nos brindarán un aporte extra de hidratación que nunca está de por demás cuando estamos en medio de programas de entrenamiento.
Marisco, huevos, carnes magras y sustitutos de las carnes:
ternera, cordero, pollo, pavo, mariscos, huevos y legumbres, son la principal fuente de proteínas que plantea el método y la dieta Kayla. Aunque también tiene en cuenta a los que no comen carne y amplía a otros productos proteicos que sustituyan a los anteriores en igualdad de proporción nutricional.
Leche y productos lácteos:
La dieta Kalya incluye queso, leche y yogur en unas dos raciones y media diarias, saltándose la polémica de los últimos años sobre la ingesta diaria de los mismos, y apuesta firmemente por ellos como una fuente de calcio capital y de otros minerales esenciales para mantener la estructura ósea en perfectas condiciones.
Frutas variadas:
bayas, arándanos, frambuesas y todas las frutas que te puedas imaginar, están indicadas en este dieta en una proporción de dos raciones diarias. No sólo nos proporcionan una legión de minerales y vitaminas, algunas son grandes antioxidantes que luchan contra el envejecimiento y contra los peligrosos radicales libres de nuestro organismo.
Consejos de gran ayuda
Pero la autora va mucho más lejos en su libro y consciente de que es complicado muchas veces mantener la concentración y la fuerza de voluntad necesarias para hacer frente a una dieta y plan de entrenamiento, nos regala cinco trucos sencillos con los que cumplir nuestros objetivos sin sufrir tampoco mucho o más de lo necesario.
Kalyn nos invita a salir comer fuera de vez en cuando mientras estamos en medio del proceso, ya que ello implica cierta liberación y no supone abandonar las obligaciones marcadas en la guía del método. Eso sí, hay que cumplir una serie de requisitos y normas a la hora de aventurarnos a salir a comer o cenar fuera, como vía de escape y equilibrio mental.
Los menús de la mayoría de los restaurantes resultan tremendamente variados, por lo que es muy posible comer bien sin salirnos de nuestra dieta, mientras disfrutamos de un ambiente distendido y de ocio. Aunque la propia Kalyin insiste en que saltarse una o dos veces la dieta, sólo un poquito, sube la moral de compromiso posterior, un poco por la culpabilidad, y nos da una alegría al cuerpo, que nadie nos quita.
La clave está en saber elegir bien el restaurante, de estilo mediterráneo o asiático preferentemente, evitando los fast foods, y así el exceso de calorías, elegir las salsas correctas evitando la mayonesa, la César o todas las blancas, también intentar llenarnos con comida sana que sacien evitando las patatas y pan blanco, y tomar raciones medianas, no platos llenos, o simplemente no comerse todo y llevar lo que sobre para casa.
AnaGT
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