Conociendo los gustos de su hijo, la actriz está preparando una fiesta con canciones y bailes de Beyoncé para cuando Otis cumpla dos años el próximo mes
El pequeño Otis, hijo de Olivia Wilde y su prometido Jason Sudeikis, ha desarrollado una intensa obsesión por la cantante Beyoncé, por lo que la actriz está preparando una fiesta con canciones y bailes para cuando Otis cumpla dos años el próximo mes.
"Una vez tienes un niño, los cumpleaños son más divertidos, por lo que todo en lo que estoy pensando es en el cumpleaños de Otis el mes que viene. Cumple dos años, lo que es mucho más emocionante que 32. Esa es la fiesta que no hay que perderse.
Va a ser una fiesta de Beyoncé con música y baile. Su amor por Beyoncé ha llegado a su apogeo, y yo lo apruebo, por supuesto, pero es intenso", contó Olivia en el programa 'The Ellen DeGeneres Show'.
El gusto de Otis por Beyoncé comenzó en un vuelo en el que Olivia solo encontró en su iPad vídeos musicales de la artista cuando buscaba con qué entretener al niño.
"Íbamos en un avión y necesitaba algo para distraerle de inmediato, y todo lo que tenía eran todos los vídeos del último disco de Beyoncé. Así que se los puse".
Pero Otis no solo quedó maravillado con el arte de la cantante, sino con parte de su anatomía.
"Quedó enganchado y sobre todo con una zona en particular. Desde ese momento la llama 'Beyoncé pechos', y creo que es genial porque la mayoría de la gente, si le llamo algo, es 'Beyoncé nalgas'. Pero él ahora mismo está todavía aquí arriba. Está todavía pensando en esa zona", explicó divertida Olivia.
