El invierno tiene un encanto especial para la celebración de una boda. No solo por los hermosos paisajes nevados, sino también por los románticos vestidos de novia de manga larga, sus numerosas ventajas y los detalles originales con los que podéis sorprender a los invitados. Os vamos a dar varias claves para organizar una boda en invierno y que salga perfecta. ¡Seguro que os encantan!
Un escenario único
La blancura del invierno proporciona un escenario único para una boda.
La luz mágica de esta época ayuda a que las fotografías sean especiales y muy románticas si las hacemos al aire libre y siempre que el tiempo acompañe. Los espacios interiores se pueden iluminar con la cálida luz de las velas y los farolillos. Por ejemplo, el Parador de Teruel os ofrece unos espacios de ensueño, ya que cuenta con amplias estancias perfectas para celebrar una boda de cuento de hasta 300 invitados. Otro detalle importante que podéis tener en cuenta en esta época es la decoración de los centros de mesa, incluyendo invernales piñas, las hojas secas e incluso flores blancas y rojas. Un toque muy romántico sería una buena chimenea que caliente el salón para la celebración para que resulte más cálido y acogedor.
Una novia abrigada
Las mangas largas, las medias tupidas, los zapatos cerrados o una buena prenda de abrigo son imprescindibles para el look nupcial de invierno. Una novia invernal siempre sorprende un estilismo romántico y favorecedor. Podéis lucir una elegante capa blanca con capucha simulando la “reina de las nieves” o una estola de pelo en el tono del vestido. Otros complementos ideales pueden ser unos guantes largos, un tocado con flores invernales o un elegante sombrero de lana. Lo fundamental es que la novia esté elegante y abrigada para no que no pase frío en ningún momento. El novio también tiene su parte y puede lucir un elegante abrigo largo en tonos grises o azul marino para no pasar frío. Por último, no olvidarse de los invitados e invitadas. Éstas últimas estarán muy elegantes con sus prendas de abrigo y sus looks invernales.
Detalles por doquier
Una boda en invierno puede ser muy original si pensamos en detalles que sorprendan a los invitados. Por ejemplo una opción original sería regalar a los invitados como detalle una amorosa manta de lana para que se la pongan sobre las piernas si tienen frío en algún momento de la ceremonia. Otra buena idea podría ser servir para calentar a los invitados un buffet de sopas y platos calientes. Otra posibilidad sería incluir en el menú una original tarta con frutos invernales como castañas y nueces. Y como colofón una mágica fuente de chocolate caliente, churros y un buen ponche. ¡Seguro que los invitados lo agradecerán!
Ventajas invernales
Una boda en invierno suele salir más económica ya que los precios están más ajustados en esta época al tener lugar menos bodas. Además los novios tienen la posibilidad de encontrar lugares de celebración maravillosos que en otras épocas es difícil que tengan fechas libres. Incluso por el mismo presupuesto podéis contar con más servicios como un DJ de moda o un candy bar con postres y dulces típicos de esta época.
Por Carmen F. Etreros.
Sandra Miranda Pozón / Zankyou
Periodista, licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, experta en redacción y marketing online. Me apasiona el mundo de la comunicación y de las bodas. He trabajado en periódicos y agencias de comunicación, y he colaborado con revistas como Cosmo TV, Zankyou, YoDona, Enfemenino, Nosotras y FemQuality.
